viernes, 21 de mayo de 2010

La bella y la bestia

Nunca nos hemos planteado por que no darle la vuelta al cuento: El guapo y la bestia o El príncipe y la bestia (ya que en vez de bello parece como que a los chicos mejor asociarle lo del príncipe ya que bello o guapo queda como un poco cursi). A mi a veces me gusta darle la vuelta a las frases o los cuentos a ver que pasa.....
Hay una pregunta que hace tiempo me ronda por la cabeza...Por qué para seducir las mujeres se simulan débiles?,  hacia dónde nos ha llevado esto? .......................voy a intentar escribir un cuento:

"Era se una vez una niña pequeñita que desde que nació miraba sorprendida y curiosa todo lo que la rodeaba, llamaba la atención sobre todo por su mirada, no es que fuera especialmente bonita pero sus ojos atravesaban todo aquello o aquel con quien se encontraba. Esta niña fue creciendo poco a poco, como todas las niñas hasta cumplir esa edad previa a la adolescencia y mientras fue  percibiendo que algunas de las cosas que hacía o decía sorprendían en incluso molestaban a la gente de su alrededor y mientras sus amiguit@s la miraban extrañad@s, sus mayores se reían o le daban plamaditas cariñosas.  Y empezó a aprender que cosas estaban bien vistas y que cosas no.
Poco a poco  hasta su forma de mirar cambió, aprendió a mirar de soslayo ya que  si no los compañeros del colegio se enfadaban o le pegaban, entonces  ella se levantaba,  agotada  de aguantar las provocaciones,  para pelear entonces dejaba cao al contrincante y se iba. Algunas veces aparecía algún hermano mayor o primo que le daba una bofetada y se largaba.
En la escuela sólo parecía que la comprendían los maestros, eso la hizo muy impopular, tuvo que auto mutilarse  para ser aceptada y no saltar ante las provocaciones. No se daban cuenta lo pequeñita y débil que ella se sentía. 
Por supuesto, que tuvo sus escapaditas, si no seguramente no habría sobrevivido, los libros (la transportaban a un mundo de sueños y fantasías donde podría ser lo que quisiera.....incluso un chico...para ellos todo parecía más fácil) y estudiar o también cuando bailaba se desfogaba como una loca. Ahí ya empezaron los mayores a verla también rarita demasiado vehemente para ser mujer, decían
Siguió creciendo y en la adolescencia aparecieron los príncipes, pero todos querían lo mismo, meterla en un palacio de cristal. No se daban cuenta que ella era capaz de ver a través de la magia, y sabía que una vez dentro el palacio se convertiría en una cárcel y  ella lo que quería era volar y bailar y ver mundo, porque eso sí, miraba de soslayo pero la curiosidad nunca la perdió. 
Tuvo una oportunidad y decidió aprovecharla a fondo y salió a ver mundo,  por supuesto luchando contra príncipes, reyes y malas brujas, ella pensaba que fuera encontraría gente como ella y podría levantar la cabeza. ¡Qué Ilusa!......Fuera encontró gente que seguía pidiéndole a gritos que se auto mutilara, o gente que se acercaba y le decía lo estupenda que era, pero lo único que quería era chupar rueda. Esta niña no sabía lo que le pasaba sólo sentía que no pertenecía a ningún lado, había salido de su pueblo y allí salvo sus padres ya no era bienvenida y tampoco lo acaba de ser  fuera, pero ella siguió y siguió cada vez más mutilada.  
Ello le provocaba mucho dolor, porque ella quería que las cosas le salieran bien, pero también había aprendido que eso al resto no le gustaba hasta que hubo un momento que no hacía falta que nadie le dijera esto no está bien......ya sabía ella que cosas podía y cuales no.....o eso creía.
A sus escapadas añadió el cine y un buen día se encontró con el espíritu de la colmena, de Victor Erice.  Y empezó a intuir la verdad, ella era una monstrua como Frankenstein. Y su vida siguió con aparente éxito aunque de vez en cuando lloraba su soledad, o tenía que acudir a cobijarse a su casa. Encontró algunos refugios, algún amigo que la entendía, alguna amiga que quizás más fuerte que ella la arropaba. Pero seguramente ellos tenían también sus mutilaciones y aunque algunos de ellos continuaron en su vida de forma intermitente hubo otros a los que perdió la pista.  
Se había mutilado tanto que un día encontró un príncipe que le gustaba así mutiladita, aunque de vez en cuando tuviera escapaditas, claro que las cosas habían cambiado. Eramos todos muy modernos y ya no había un palacio a dónde ir, si no una casa que compartir y por tanto ya no temió que se convirtiera en cárcel.  ¡Qué Ilusa!. Porque fuera había guerra y ella era la única que estaba en las trincheras luchando contra el mundo. Luchando y luchando logró hacerse un territorio fuera, pequeñito pero por dónde podía pasear sin miedo a las bombas, siempre había alguna que se escapaba, era cuestión de ser rápida y esquivarla. 
Conforme se calmaba la guerra,  ella se hinchaba y se hinchaba hasta que casi no podía respirar y los médicos decidieron intervenir. Le pararon un poquito las hormonas y le prometieron que pronto podría volver a su estado, pasó mucho tiempo pero no notaba cambio salvo que el príncipe era cada día más feliz hasta que un día empezó a desincharse y a corretear por el campo, y el príncipe se puso triste y los barrotes crecieron y crecieron. Entonces ella necesito huir, no sabía muy bien por qué, sólo que era cuestión de vida o muerte. Cogió su hatillo y se fue de la casa encantada.  

No creáis que fue fácil, ella estaba pérdida y dónde esperaba comprensión muchas veces se encontró con gente que aún la machacaba más, hasta que poco a poco se fue encontrando con monstruas como ella, que volaban, que cuidaban y se dejaban cuidar y empezó a comprender que no estaba sola que había muchas monstruas por ahí, fuertes, asustadas y luchadoras con sus propias mutilaciones y que estaban despertando como ella. Y empezó a sentirse feliz, como nunca se había sentido. 
Pero claro también quería conocer monstruos, porque las monstruas está bien pero ella quería seguir explorando, y conoció monstruitos que todo jijijajaj mientras miraba de soslayo, pero si se atrevía a mirar de frente uff. yuyuy algunos con reverencia pero asustados, otros simplemente salieron corriendo mientras ella estaba paralizada porque sabía que si se movía .......hasta que un día se encontró con un monstruo muy grande y ¡Oh sorpresa! cuando le intentaba mirar de frente no se asustaba sino al revés se le ampliaba la sonrisa, incluso a veces le daba miedo a ella, pero claro los monstruos siempre tienen un secreto, pese a todo se dijo voy a intentarlo porque se daba cuenta que cada vez que se veía con él, era capaz de reconstruir una mutilación y así poco a poco empezó a desperezarse y a bostezar y a recuperar su tamaño, y cada vez se sentía más feliz hasta que un día se miró al espejo y se dijo vaya, soy yo, ya no me tengo que acachar, ya no tengo miedo a que huyan, puedo mirar de frente ya no hay miedo y se sintió plenamente feliz. Y parecía que el monstruo también,  pero......
       Os preguntaréis ¿Si se asustó y huyó?  
       pues sí,  huyó...claro que ya no era tan grande y tenía un secreto.....
       Quizás al monstruo aún le quedan mutilaciones que recuperar..........
Entonces, la monstruita posteriormente monstrua se convirtió en mujer, cogió su mochila, sus botas y su bastón y decidió ir a explorar mundo, con el mínimo peso posible, y sin mutilaciones. 
Colorín colorado este cuento se ha acabado....."

auto mutilarse-la idea la he tomado de el callejón de los milagros de Naguib Mahfuz, dónde los mendigos se automutilan para dar lastima y poder ejercer la profesión de mendigo-




Este cuento se lo dedico sobre todo a todas aquellas monstruas que me he ido encontrando en el camino, y que nos hemos ayudado las unas a las otras a minimizar los efectos colaterales que produce el vivir. (Se que en mi vida ha habido monstruos que también han ayudado mucho, pero esta entrada quiero dedicársela a las mujeres, o sea perdonarme chicos pero otra vez será). Aunque hay muchas que se quedan en el camino, condicionadas por el que dirán, o con mutilaciones que ya son irreversibles y otras que asumiendo el papel de represoras ayudan a que se siga manteniendo esa necesidad de mutilar.

Algunas referencias: Quizás no son directas, pero si indirectas, ya que a veces la literatura y el arte tiene mucho valor terapéutico. Películas como El espíritu de la colmena, Remando al Viento de Gonzalo Suaréz, o la novela Frankenstein de Mary Shelley y como no el cuento, donde viven los monstruos título comentado en una entrada anterior y por supuesto el maravilloso libro mujeres que corren con los lobos que me despertó los instintos y claro también tuve que recurrir durante un periodo especialmente duro a ayuda terapéutica, gracias Ramón.

Y para finalizar que tiene esto que ver con la bella y la bestia, pues yo creo que bastante porque yo me pregunto tanto miedo nos tienen los hombres que necesitamos automutilarnos para ser aceptadas, aunque sea temporalmente (zapatos con tacón de vértigo que casi no te permiten valerte por ti misma, faldas estrechas que limitan la movilidad, u otra lindezas como decía mi amiga Mila, como la de operarse para ser aceptada...) podríamos pensar desde la tradición judeo-cristiana: como Eva le dio la manzana a Adan..la mujer siempre ha significado la tentación......sí pero hay otras culturas en las que directamente se nos mutilaba, como en China con el vendaje de los pies (simplemente para el placer de los hombres ya que esos pies pequeñitos era/es el colmo del erotismo (de alguna manera no reproducimos ese tipo de pie conlos tacones?)) o la ablación en África, (por si acaso a las mujeres les gusta el sexo....), que todavía se sigue practicando. 
¿Por qué la seducción, mayoritariamente se basa en mostrarnos dulces, sumisas y débiles?.... para que el príncipe azul se apiade de nosotras nos rescate y acabe, algunos de los casos golpeando para aplacar sus propias frustaciones, aunque claro siempre hay príncipes buenos, además la mayoría de las veces no hace falta, ya hemos aprendido,  nos mutilamos solitas. Desde pequeñitas nos están enseñado a mutilarnos y por si hay alguien que se escapa siempre hay alguna guardiana que nos lo recuerda.......

O sea, porque no cambiamos el cuento Ella es la bestia (al fin y al cabo es femenino) y ellos son el bello que nos tiene que demostrar amor verdadero para convertirnos/vernos como mujeres....el bello y la bestia ..... algunas lo consiguen otras mueren en el intento pero quizás valga la pena intentarlo......

1 comentario:

depiedraenpiedra dijo...

Encantada de encontrarte,ese cuento me ha hecho hecho pensar en unas cuantas cosas....

suerte, y salud!