sábado, 6 de octubre de 2007

Caotica Ana, El Vagabundo de las Estrellas

Caótica Ana es una película de Julio Medem y El Vagabundo de las estrellas es una novela de Jack London.
Hoy he ido a ver la película de Julio Medem y no se por qué me ha recordado al novela de Jack London.

En la película Caótica Ana la protagonista es inducida a realizar un viaje hacia el interior de si-misma. Este viaje realizado bajo hipnosis le permite conocer la historia de otras mujeres cuyas vidas influyen en la vida de la protagonista. En la película hay una oposición entre lo femenino y lo masculino. Lo femenino como embaucador y lo masculino como guerrero, aunque mucho más desdibujado que lo femenino. Al hombre lo presenta como el señor de la guerra, como dice Daniel Galindo en la entrevista a Medem de la netro.
La película me ha encantado, sobre todo visualmente y el mundo un poco onírico que presenta, aunque no comparto esa visión del hombre y de la mujer. Yo siempre me he definido como feminista y quizás con los años cada vez más femenina. Como mujer me disgusta la idea que en un mundo de mujeres no habría guerra. Quizás no sea muy femenino ir a la guerra, pero las mujeres siempre que ha sido preciso han ido, y a los hombres no siempre les ha gustado ir. Pero de todas formas aplaudo el planteamiento de rebuscar en el pasado para conocernos mejor a nosotros mismos.
Y por tanto considero muy recomendable la visión de la película.
Esa idea de escarbar en vidas pasadas de la protagonista me conecto con el libro de Jack London. El libro lo vi en casa de Tina, de Paula. Me impactó la carátula y por supuesto el título El vagabundo de las estrellas. Por el título pensé que era un libro de ciencia ficción pero el autor me extrañaba. Había oído hablar de Jack London pero no había leído nada de él y me chocaba, no sabía si sería el mismo autor o no. Y decidí leerlo. El protagonista esta en una prisión y mediante un alto grado de concentración (también llamado meditación), aunque no soy muy experta en estos temas, consigue revivir, o ensoñar otras vidas pasadas que le liberan de su vida actual.
Este libro me fascinó, de hecho lo he solicitado en alguna librería pero está agotado. Siempre me han gustado las novelas de aventuras, desde adolescente. Y este libro además de aventura te permite comprobar lo rica que puede ser la imaginación, si no crees en la reencarnación, y la capacidad del ser humano para sobrevivir a las situaciones más difíciles.

La conexión la hizo mi memoria, igual algún día entiendo mejor el por qué, pero me falta comentar que esa idea pura de lo femenino-seductor y lo masculino-guerrero de la película de Medem me surgió leyendo el libro de Marcela Serrano, Antigua vida mía al que quiero dedicar una entrada.

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